Nuestras fiestas
Los yeclanos somos gente sencilla y nos encantan nuestras raíces y nuestras costumbres. Por eso teníamos que mantener la esencia de algo tan nuestro como lo son las Fiestas de San Isidro. Teníamos que encontrar la manera de conseguir transmitir a las generaciones futuras este espíritu para que conserven la esencia, la magia y la alegría de nuestras fiestas.
Con el auge de nuestras Fiestas de San Isidro, en el año 2000 se constituye como tal la Federación de Asociaciones de Peñas de las Fiestas de San Isidro Labrador, aunque previamente ya se habían dado los primeros pasos para crear una comisión de fiestas en el año 1994.
Actualmente la finalidad principal de la Federación de Peñas de San Isidro es coordinar el aumento de peñas que cada año se suman a las fiestas; a la vez que conservar la originalidad y costumbre de los principales actos, para mantener la tradición. Para organizar y desarrollar las Fiestas de San Isidro Labrador contamos con la colaboración y el apoyo del Excelentísimo Ayuntamiento de Yecla, a través de las Concejalías de Festejos, Cultura y Turismo, así como de las peñas federadas.
Órganos constitutivos de la federación
La Federación de Asociaciones de Peñas de las Fiestas de San Isidro Labrador está constituida por la asamblea general y la junta directiva.
La asamblea general es el órgano de expresión de la voluntad de la Federación, que está formada por todas las Asociaciones de Peñas federadas, a través de su presidente y su secretario.
La junta directiva está compuesta por diez representantes de las Asociaciones de Peñas Federadas, que son elegidos por la Asamblea General, para un periodo de cuatro años y un máximo de ocho años. Es la encargada de hacer cumplir los acuerdos aprobados por la Asamblea General.
Historia de las fiestas
Nuestras Fiestas de San Isidro Labrador son el resultado de la devoción de los yeclanos al santo patrón de los agricultores.
El comienzo de esta devoción a San Isidro en Yecla se inicia en el siglo XIX con la constitución de la Real Empresa de Iluminación de Aguas de San Isidro entre 1816 y 1818. Un colectivo de 32 personas decidió crear en Yecla una compañía para el alumbramiento de aguas en las inmediaciones del denominado Cerrico de la Fuente, iluminando poco después un importante caudal.
El éxito del proyecto hizo que esta compañía comenzara con el culto a San Isidro Labrador en Yecla, encargando una imagen y poniéndola en una capilla en la ermita de Santa Bárbara.
Durante la celebración de la onomástica del Santo se celebraban unos sencillos actos. En la víspera, la tarde noche del 14 de mayo, se realizaban hogueras a las puertas de la ermita de Santa Bárbara, se disparaban cohetes y tracas y resonaban las campanas. En la mañana del 15 de mayo, había una procesión por las inmediaciones de la ermita seguida de una Misa Solemne.
Fue en 1941 cuando se crearon las denominadas “Hermandades Sindicales de Labradores y Ganaderos” quienes, constituidas bajo el patronazgo del Santo madrileño, fueron las promotoras de las Fiestas de San Isidro en toda España, y entre ellas Yecla, junto al arcipreste José Esteban Díaz, la Sección Femenina y la Hermandad de la Ciudad y el Campo. Así, en 1943, dicha Hermandad acordó adquirir una talla de San Isidro al alcoyano D. Miguel Torregrosa Alonso. Esta imagen que llegó a Yecla el 14 de mayo de 1945, celebrándose al día siguiente, el 15 de mayo de 1945, la primera procesión que dio origen a las actuales Fiestas de San Isidro en Yecla.
Hasta 1948, los festejos eran básicamente de carácter religioso. En 1949 se empezaron a incluir otros elementos como el desfile, la ofrenda y una exhibición de bailes folklóricos locales. Aunque no es hasta 1949 cuando se habla de “Gran procesión”, misa cantada y “programas especiales sobre las fiestas populares”. Aquí es cuando por primera vez se añade al desfile una yunta de bueyes seguida del cortejo de tres grupos de mujeres, la imagen de San Isidro portada por mozos vestidos de labradores y largas filas de agricultores.
En 1950 ya se incorporan carros engalanados, el origen de las actuales carrozas (aunque la técnica de los “papelicos” tardaría un año más en llegar) y durante toda la década de los 50 las Fiestas de San Isidro en Yecla vivieron un periodo de gran consolidación y esplendor.
A partir de 1952 se inició la conocida como Batalla de Flores y el Concurso de carrozas. Fueron arrojadas desde las carrozas y balcones de las casas gran cantidad de flores, dulces, confetis y serpentinas y se realizó la primera entrega de premios a los mejores vehículos y animales engalanados, así como a los labradores y labradoras ataviados con el traje típico local. A partir de entonces han aumentado los premios, donados tanto por organismos oficiales como por empresas particulares.
Como dato curioso, en la década de los 70 la participación ciudadana bajó e incluso hizo desaparecer las Fiestas en 1977. Por suerte, en 1979 volvieron a ponerse en marcha en el mes de junio.
Los temas de las carrozas antiguamente iban relacionados con el campo y los títulos eran críticas en forma de verso. Hoy en día el tema ha variado, en la categoría de adulta son temas relacionados con el campo, Yecla y costumbres populares; mientras que en la categoría infantil, son más temas de fantasía.
Todos los datos históricos de nuestras Fiestas han sido extractados del libro:
Las Fiestas de San Isidro de Yecla. Orígenes, Documentos e Historia (1943-2000). De Daniel Andrés Díaz y Francisco J. Carpena Chinchilla, publicado por la Federación de Peñas de San Isidro de Yecla en 2013.
Los santos
El éxito de la compañía para el alumbramiento de aguas de Yecla fue el origen del culto a San Isidro Labrador en Yecla y a su esposa Santa Maria de la Cabeza. Esta compañía fue la que estableció y fomentó el culto a San Isidro Labrador en Yecla, sufragando a sus expensas una imagen y una capilla en la ermita de Santa Bárbara. Posteriormente, editó una Novena dedicada a San Isidro y su esposa Santa María de la Cabeza, compuesta por D. José Soriano García, impresa en Orihuela en 1849.
En 1941, se crearon las denominadas “Hermandades Sindicales de Labradores y Ganaderos” quienes, constituidas bajo el patronazgo de San isidro, fueron las promotoras de las Fiestas de San Isidro en toda España, y en Yecla. La Hermandad de la Ciudad y el Campo, en 1943, acordó adquirir una talla de San Isidro al alcoyano D. Miguel Torregrosa Alonso. Esta imagen llegó a Yecla el 14 de mayo de 1945, y al día siguiente se celebró la primera procesión que dio origen a las actuales Fiestas de San Isidro en Yecla.
Poco después, entre 1951 y 1954 desfiló una primera imagen de Santa María de la Cabeza, que se sustituyó a partir de 1957 por la imagen actual que se conserva en la Basílica de La Purísima.